Fidelio Despradel nació prácticamente con la dictadura, en 1937, y creció como el país, entre dos tendencias ideológicas contrarias: la de su familia materna, antitrujillista de pura cepa, y perseguida con saña por la tiranía, y la de su padre, funcionario de Trujillo. Un incidente ocurrido cuando tan solo contaba con 13 años, rompió la campana de cristal bajo la cual vivía, convirtiéndose en un militante antitrujillista.
A los 21 años de edad, ya estaba integrado en uno de los tantos mecanismos que venían desarrollándose a lo largo del país y en sus diversos sectores sociales, conjunto de células que el 10 de enero de 1960, los delegados y delegadas venidos de todas las regiones y sectores sociales del país, que habían asumido la trascendente iniciativa de Manolo, Minerva y un puñado de su generación política de unir a todos los núcleos y círculos de resistencia en una sola organización, dejaron constituido, en la estricta clandestinidad, al “Movimiento Revolucionario 14 de Junio”.
Por su militancia antitrujillista, y sus consecuentes acciones en esta dirección, en septiembre de 1959, fue apresado por el Servicio de Inteligencia Militar (SIM) y conducido a la cámara de tortura denominada “La 40”.
Con responsabilidades que lo llevaron a misiones de contacto y gestión de abastecimiento bélico para la lucha interior, por el amplio mundo de las Antillas Menores, Venezuela, Estados Unidos y Europa, una vez ajusticiado el tirano y constituido públicamente el Movimiento Revolucionario 14 de Junio, Fidelio fue nombrado Secretario de Organización del Comité Central de la organización.
Tuvo una importante participación en los acontecimientos convulsos de finales de 1961 y 1962, y fue Comandante del frente guerrillero de “las Manaclas”, cuyo líder supremo (de todos los frentes guerrilleros) lo era Manolo Tavárez Justo. Además fue Comandante en la Guerra de Abril de 1965, frustrada por la invasión militar norteamericana.
Para Fidelio la vida ha sido una continua búsqueda de alternativas, de fórmulas para mantener viva la gloriosa memoria de la lucha del pueblo y de las distintas generaciones de luchadores del país, y sus perspectivas de futuro.
Impulsó múltiples intentos de fomentar el pensamiento marxista vía la publicación de revistas y libros y de una nueva e intensa “praxis política”, y trabajó en la organización de una fuerza política basada en el entonces pionero Movimiento por el Socialismo (MPS), en la revista teórica marxista Nuevo Rumbo y los periódicos Nueva Fuerza y Fuerza Socialista.
Entre los años 1976-1979 participó en primera fila, en un esfuerzo continental por unir las organizaciones y movimientos socialistas en América Latina, Estados Unidos y España, en pos de lo cual viajó en varias ocasiones, tanto a Nicaragua, como a México, que era la sede de las reuniones continentales.
En el año 1998 fundó la revista política “Antes del Amanecer”, fruto de su perseverante esfuerzo de toda la vida (64 años de militancia continua) de construir caminos para la superación de un país, con modelos en extremo injustos, impuestos por las clases dominantes, el imperialismo y los partidos que defienden los intereses de estos sectores.
Fue co-fundador e inspirador de la Fundación Manolo Tavárez Justo, cuyo nacimiento data de 1983, en ocasión del XX Aniversario de la caída de Manolo Tavárez Justo en las lomas de la Cordillera Central (Las Manaclas).
Por toda su larga militancia, Fidelio ha sufrido persecución tenaz, cárcel, torturas, exilio forzado e incluso encarcelamiento en países extranjeros.
En el año 2016, para sorpresa de muchos, es elegido Diputado Nacional, por el Partido Alianza País. Aprovechando este nuevo escenario, se enfocó en defender a los jóvenes del país, los recursos naturales, la lucha contra la explotación de las multinacionales mineras, el medioambiente y de manera muy especial: el agua.
Asimismo, ha combatido el injusto e inequitativo sistema de salud y de la educación en nuestro país, propugnando porque el Estado haga realidad una educación y servicio de salud de calidad y universales, sin discriminación.
Es además, un aliado leal de la causa de las mujeres, los pobres y la juventud, por lo que aprovecha cada oportunidad para salir en su defensa y participar en sus actividades.